El Instituto del Niño y Adolescente del Uruguay (INAU) exigió el “cese inmediato” del director del Cottolengo Don Orione, el padre Juan Ramón Molina, tras comprobar que algunos niños sufrieron quemaduras de 2º y 3º grado, luego de estar expuestos al sol durante cuatro horas, al mediodía, en el marco de un viaje organizado por institución. “Recibimos la información inmediatamente y mandamos nuestro servicio de salud al lugar, que constató que muchos de los chicos tenían quemaduras de 2º y 3º grado”, aseguró el director del INAU, Dardo Rodríguez.
Molina, que dirige la institución desde diciembre del año 2009, dijo no entender “cómo hacen tanta alharaca por cuatro chicos que volvieron colorados”, y afirmó que “no hay lugar en el Uruguay” donde los jóvenes estén mejor atendidos. Enterados del suceso, las autoridades del INAU se comunicaron con los responsables de la congregación Don Orione, para solicitar “el cese inmediato del director, porque ya teníamos inconvenientes previos”, explicó Rodríguez.
El pasado 7 de febrero, Hilda de Salterain, la única pediatra del Cottolengo en los últimos ocho años, presentó su renuncia. En una carta adjunta, la pediatra destacaba el “detrimento de la calidad de la comida” que se les ofrece a los internos; señalaba que “los niños están más descuidados en su higiene personal”, y que se produjeron “cambios de cuidadoras, por personal que no reúne el perfil para el trato de estos niños tan especiales”. La pediatra denunció “gritos, rezongos, penitencias a toda hora, imposible imaginar en otras épocas”. La profesional agregó que se produjo la suspensión de la compra de algunos medicamentos fundamentales para los niños. 24 días después de la renuncia de De Salterain, aún no hay una nueva pediatra en el Cottolengo.
Molina, en tanto, negó las versiones de la especialista, y dijo que “los funcionarios se molestan porque en lugar de tomar mate, ahora tienen que ponerse a trabajar”.
Según Rodríguez, quien anunció que están esperando la respuesta de la congregación, “el Cottolengo con INAU tenía una relación muy buena con el director anterior, y a partir de la llegada de este nuevo director empezaron a surgir esta serie de problemas, inclusive denuncias de funcionarios”. “Esperamos una respuesta de la congregación, que nombren una nueva dirección y que se restablezca el relacionamiento normal que teníamos antes de la llegada de este señor”, finalizó Rodríguez.
Actualmente, en el Cottolengo Don Orione masculino, hay 275 internados, entre niños, adolescentes y adultos con discapacidades físicas y mentales.
(El País, pág. B3; 03/03/2011)
es lamentable como viven estos curas. que de voto de pobreza no conocen esa palabra.que dejan el nombre de dios x el piso.lamentablemente todo se sabe tarde lo que pasa que no controlan como deberian de hacerlo y en la congregacion.todas esas istituciones tendrian que estar bajo la lupa.
ResponderEliminarsore la congregacion yo creo que falta comunicacion en vez de ver tanto los bienes conocer mejor a dios, entonces si primero segumos ese su ejemplo, para estas cosas malignas no habra tiempo, porque antes de manchar su nombre podemos elegir ser buenos hijos de dios y no de lo que no es nuestro...
ResponderEliminaresa congregacion deja mucho que hablar.
ResponderEliminardios perdone a esta gente que abusa de los mas indefensos.pero gracias adios todo sale a la luz. tarde o temprano.
ResponderEliminarque tristeza como dejan el nombre de dios.despues la gente dice esos son los que estan en la iglecia si.porque dios deja libre al hombre y en su libertad le permite que pasen estas cosas.controlen mas estos lugares y todo lo que este relacionado a esa congregacion.
ResponderEliminarla prensa siempre observando negativamente estas cosas. no digo que existen cosas negativas en este tipo de congregaciones u hogares, pero como ex empleado de un hogar de ancianos religioso estoy convencido de que hay mas cosas positivas por las cuales publicar, o preocuparse que deberían salir a la luz. en cualquier hogar religioso o no, hay discrepancias entre funcionarios y empleadores, malos entendidos, malas decisiones, cosas que nos parecen malas, que en verdad son tonterías y prejuicios.
ResponderEliminar